Mostrándote mis colmillos y encendiendo el brillo de tus ojos.
Sintiendo la energía por cada poro de tu piel.
Con toda la alegría de haber coincidido contigo en esta vida.
Como tu voz susurrante detrás de mi oreja
Y un mordisco repentino.
Siendo un "nosotros" muy nuestro y real.
En nuestro espacio atemporal en el que vale todo.
En una ola de letras, música, ARTE.
Con mucho que dar y más aún que recibir.
Columpiándote entre el olor de mi pelo.
Con seguridad y una sonrisa picaruela al mirarnos a los ojos.
Alimentándonos de una locura que nos cuida a los dos.
En un espacio suficientemente amplio para ti y para mí
pero en el que no entra nadie más.
Con admiración cercana, muy cercana.
Impaciencia y ganas insaciables de piel y poesía.
De luz y escalofríos.
En mis noches de insomnio, en mis ganas de volar.
Inspirando al compás de mis latidos al escuchar una canción.
Recordándote cuando necesito un pecho donde descansar.
Y ser feliz.
Así es como te quiero.
Me he preguntado muchas veces qué será de ti ahora. Ya no leo esos colmillos que se muestran al mundo con fiereza. Espero que todo te vaya bien. Si algún día te acuerdas de este espacio, y decides publicar, será un placer leerte ;)
ResponderEliminarBesos
Palabras sabias..
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